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24/09/2024
Cuando decides vender una propiedad en Bahía Blanca a través de una inmobiliaria, es esencial conocer las obligaciones que ésta tiene para garantizar una transacción exitosa y legal. Las inmobiliarias actúan como intermediarios profesionales entre el comprador y el vendedor, asegurándose de que todo el proceso cumpla con la normativa vigente y protegiendo los intereses de ambas partes.
A continuación, te explicamos las principales obligaciones que tiene una inmobiliaria durante el proceso de venta de una propiedad.
Una de las primeras obligaciones de la inmobiliaria es realizar una tasación adecuada de la propiedad. Esto implica evaluar las condiciones del inmueble, su ubicación, los servicios cercanos y las características del mercado inmobiliario en la zona. El objetivo es establecer un precio justo y competitivo que permita atraer a compradores potenciales y garantizar una venta dentro de un tiempo razonable.
La inmobiliaria debe:
Realizar una visita a la propiedad para inspeccionar su estado general.
Considerar factores como la ubicación, tamaño, antigüedad, y características especiales del inmueble.
Analizar el mercado local, comparando propiedades similares que se hayan vendido recientemente.
Este servicio se cobra aparte , consulte el valor al 2914148812
Una vez que se ha determinado el precio de venta, la inmobiliaria tiene la obligación de promocionar la propiedad para atraer el mayor número de compradores potenciales. Esto incluye la publicación en portales inmobiliarios, redes sociales, y otros medios de publicidad, así como la organización de visitas a la propiedad.
La promoción debe ser efectiva y transparente, mostrando las características reales de la propiedad y destacando sus ventajas, como su ubicación, servicios cercanos, estado de conservación, etc.
No todas las personas interesadas en la propiedad serán compradores adecuados. La inmobiliaria tiene la responsabilidad de filtrar a los posibles compradores, verificando su solvencia y asegurándose de que cumplen con los requisitos necesarios para avanzar en la negociación.
Esto incluye:
Solicitar la documentación necesaria para verificar la capacidad de compra del interesado.
Organizar visitas con compradores que realmente estén interesados y tengan capacidad de adquisición.
Una de las obligaciones más importantes de la inmobiliaria es proporcionar asesoramiento legal en todo el proceso de venta. Esto implica garantizar que los contratos sean claros y cumplan con todas las normativas vigentes, protegiendo los intereses tanto del vendedor como del comprador.
La inmobiliaria debe:
Redactar un contrato de compraventa que sea legalmente vinculante.
Asegurarse de que el contrato cumpla con todas las leyes locales y nacionales.
Informar al vendedor sobre cualquier impuesto, tasa u obligación legal que deba cumplir en el proceso de venta.
La inmobiliaria tiene la responsabilidad de actuar como intermediario en las negociaciones entre el comprador y el vendedor. Esto incluye presentar las ofertas que realicen los compradores interesados y asesorar al vendedor sobre la mejor manera de responder.
Durante la negociación, la inmobiliaria debe:
Proporcionar información clara y detallada al vendedor sobre las ofertas recibidas.
Actuar de manera imparcial y profesional, buscando siempre cerrar la venta en las mejores condiciones para ambas partes.
Asegurarse de que el proceso de negociación sea transparente y fluido.
Una inmobiliaria también tiene la obligación de gestionar toda la documentación necesaria para que la venta se complete de manera exitosa. Esto incluye coordinar la entrega de los documentos del inmueble, como títulos de propiedad, planos, cédulas catastrales, y cualquier otro papel que sea requerido.
Entre los documentos que debe asegurarse que estén en orden se incluyen:
Escritura de la propiedad.
Certificado de libre deudas de impuestos y servicios.
Cédula catastral, en caso de que sea necesaria.
Informe de dominio del Registro de la Propiedad.
Además, la inmobiliaria deberá coordinar la firma del boleto de compraventa y la escritura final, asegurando que todos los aspectos legales estén debidamente cubiertos.
Finalmente, la inmobiliaria tiene derecho a cobrar una comisión por sus servicios, la cual suele ser un porcentaje del valor de la propiedad vendida. Esta comisión debe estar claramente establecida desde el inicio, y ambas partes deben estar de acuerdo sobre su valor.
En general, el porcentaje de comisión por una venta inmobiliaria en Bahía Blanca suele ser del 3% al 5% del precio de venta, dependiendo del inmueble que se trate . Este monto cubre todos los servicios prestados por la inmobiliaria, desde la promoción y negociación hasta la gestión de los trámites.
Vender una propiedad a través de una inmobiliaria tiene numerosas ventajas, ya que asegura una gestión profesional y legalmente correcta del proceso. Algunas de las principales ventajas son:
Tranquilidad y seguridad: Al contratar una inmobiliaria, te aseguras de que todo el proceso sea manejado por expertos que conocen las normativas legales y las dinámicas del mercado.
Mayor visibilidad: Las inmobiliarias cuentan con los medios y las plataformas para promocionar tu propiedad a un público más amplio.
Asesoramiento continuo: Desde la tasación hasta la firma de la escritura, contarás con el respaldo y el asesoramiento de profesionales en cada etapa.
Gestión de conflictos: En caso de que surjan problemas o desacuerdos durante la transacción, la inmobiliaria actuará como mediadora para resolverlos de la mejor manera posible.
En resumen, una inmobiliaria tiene múltiples obligaciones en el proceso de venta de una propiedad en Bahía Blanca. Desde la correcta tasación y promoción del inmueble, hasta la gestión de la documentación y la negociación con el comprador, su papel es clave para garantizar una transacción exitosa y segura.